SHIMPAKU KISHU 03 AÑOS

Originaria de Japón, esta variedad es especialmente valorada por su follaje denso y compacto, así como por su color verde intenso. Es una de las elecciones más populares para la creación de bonsáis Shimpaku.

Corteza

La corteza del shimpaku bonsái se caracteriza por ser muy suave al tacto y por tener un color marrón rojizo con una textura muy interesante a medida que el árbol envejece. La corteza del shimpaku es otro elemento estético que tiene este árbol; además, su corteza nos dice mucho en cuestión de edad y crecimiento.

La evolución de la textura de la corteza es gradual, su color cambia con el paso del tiempo y tiene una impresionante resistencia a las condiciones climáticas cambiantes. Si observas la corteza de cualquier shimpaku bonsái, podrás percatarte de varios detalles fascinantes que cuentan una historia. Para los amantes del arte bonsái, la corteza de este árbol es sumamente interesante.

Ubicación

La mejor ubicación para el shimpaku bonsái es en el exterior, es decir, al aire libre. Aquí es donde el árbol sacará el máximo provecho a la luz de la resolana para que pueda crecer sano y fuerte durante todo su desarrollo. Colocar este bonsái en interiores tampoco está mal, sin embargo, no crecerá de la misma forma o con la misma vitalidad que estando al aire libre, cerca de la luz solar.

Cuidados

El cuidado de este árbol bonsái debe ser muy meticuloso; deberá ser regado de manera adecuada y su poda debe ser regular, así como la exposición al sol. Es muy importante no saturarlo de agua al momento del riego, ya que debes permitir que el sustrato se seque un poco entre los procesos de riego.